Así, el pescadero, le enseñó las diferentes variedades de pescado que tenía. Alejandro le preguntó si tenía tiburón, desde que tenía 3 añitos ha estado obsesionado con los tiburones y los dinosaurios.
Después pasamos por la carnicería. Ydespués de mirar todo tipo de carnes, a todos se les iluminó la cara cuando vieron las hamburguesas. Se nota que les gusta
A continuación pasamos por la frutería. Allí compramos fruta para hacer una macedonia en clase.
Era para verlos pedirle al frutero lo que queríamos: "¿Me pone un kilo de peras, por favor?".
En este pequeño mercado hay un puestecito pequeño con el zapatero de toda la vida, el que nos ponía las tapas a los tacones, y nos cosía las cremalleras en las maletas. Es una de las profesiones más entrañables y que no me gustaría que se perdieran
Justo al lado, la droguería, con los productos de limpieza
Y en la puerta de la plaza está el puesto de los churros.
Allí compramos unas docenas para comérnoslas con los niñ@s .
A las 11 menos cuarto nos esperaba el autobús para llevarnos a Telepizza
No sabían lo que le esperaba en la pizzería....
¡¡¡ SE CONVIRTIERON EN AUTÉNTICOS PIZZEROS!!!
Lo primero es colocarse las gorras.....
Y ahora... Con las manos en la masa...
Y después al horno.
Mientras esperábamos a que las pizzas estuviesen listas,
a jugar en el parque de bolas. Se lo pasaron en grande.
Y por fín, llegaron las pizzas.
Teníamos tantas ganas que nos quemábamos porque estaban recién hechas .
Algunos se comieron tres y cuatro trozos, eran la pizza que habían hecho ellos mismos , así que tenía que estar buena.
Quiero agradecer al personal de Telepizza el buen trato que recibimos,
sobretodo a Emi, que estuvo con nosotros todo el tiempo, por su cariño y su paciencia
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